LEVANTATE PARA LA BATALLA

LEVANTATE PARA LA BATALLA

ORACION:  para ir a la Guerra.

Señor habla a mi vida, revélame, necesito que me des sabiduría, para andar en este mundo; no para andar como un ciego mas en esta tierra, chocándome con todo, ya no quiero andar  a ciegas yo anhelo que tu alumbres mi camino, que tu me reveles aquello que  aun hoy, no he entendido, porque yo quiero entenderlo Señor.

Oh Señor revélame tus verdades,  enséñame como pelear esta batalla, tu palabra dice que no es en  mis fuerzas, sino con tu santo  Espíritu, dulce  Espíritu santo ven a mi vida lléname de ti, toma mas de mi y  dame mas de ti, te necesito en mi vida, ahora porque el ayer ya paso, y tus misericordias son nuevas cada día, llena mi vasija de aceite nuevo, renuévame, dame las fuerzas que mi  cuerpo cansado necesita, rejuvenéceme como  a las águilas, para levantarme y volar hasta el horizonte, enséñame que tengo que hacer para ensanchar  mis estacas, devuélveme mis sueños, mis ilusiones, dame tu gracia oh  Señor.

Prepárame para la batalla, yo quiero pelearla y quiero ganarla, porque tu ya ganaste por mí,   perdóname por haber estado dormida durante tanto años.

No puedo quedarme sentada nada más, mirando como pasa la vida, mirando como el enemigo me roba las  finanzas, los sueños, y van pasando los años y todo sigue igual o peor.

Señor a esta hora tomo mi espada, me pongo la armadura de Dios, el cinto de la verdad, la coraza de la justicia, el calzado del apresto del evangelio de la paz, el escudo de la fe, y el  yelmo de la salvación;  y peleo esta  batalla, en el nombre de Jesús.

Señor vengo ante ti a esta hora, tal como soy, y tal como estoy no puedo venir de otra manera, tu me conoces desde antes de la fundación del mundo, y  me formaste en el vientre de mi madre, mi embrión vieron tus ojos, Señor yo te necesito en min vida.

Señor, ayúdame a pelear esta batalla, esta buena batalla de la fe; y es buena porque se en mi corazón que la ganare en tu nombre Señor.

Padre, perdóname por haberte fallado tanto, perdóname Señor por haber bajado los brazos, perdóname por estar en esta condición, de debilidad, y pensar que ya no hay oportunidad para mí; perdóname Señor por haber dudado, perdóname por esta incredulidad que a veces se anida en mi corazón, y no deja que los milagros se manifiesten en mi vida.

Ayúdame Señor a tener fe, aumenta mi fe oh Señor de la gloria, en esta hora te pido perdón y renuncio a todo lo que me detuvo hasta ahora, renuncio a todo sentimiento negativo, a todo lo que me impidió levantarme en fe, renuncio a la incredulidad, renuncio al abandono, renuncio al rechazo, renuncio a la soledad, renuncio al rencor y al resentimiento, renunció a la amargura, a la falta de perdón, renuncio al conformismo, en esta hora en el nombre de Jesús;  perdono de todo corazón, a las perdonas que me hicieron daño en el pasado, y en el presente, a los que me lastimaron, a los que me trataron injustamente, a los que no supieron comprender, a los que con los dichos de su boca y malos pensamientos me maldijeron, hoy los perdono en el nombre de Jesús.

Y cancelo esas maldiciones que me lanzaron, cancelo todas esas palabras de maldición, y me desato en esta hora, de toda atadura, de toda ligadura, de todo lazo, que lanzaron sobre mí; hoy me desato en el nombre de Jesús, y me declaro libre, me declaro bendecida, y prospera en el nombre de Jesús; y hoy declaro, profetizo por el poder la palabra, que me levanto,  que salgo del cautiverio, declaro que salgo de las prisiones espirituales, alma mía ahora;  sale del cautiverio; alma mía ahora sale de esa prisión, a los lugares celestiales junto con Cristo.

Hoy declaro que me levanto en fe, para conquistar mi tierra prometida, declaro que me levanto en fe en esta hora para salvar a mi generación, para que mis hijos y mis nietos, sean bendecidos y prosperados, para que amen al Dios altísimo con todo su corazón, con toda su mente y toda su alma, y sean instrumento de Dios en esta tierra.

Hoy me levanto como se levantó Débora, como una mujer despierta y entendida, lista para la batalla, como una guerrera del ejercito del padre celestial, para  pelear por mi familia, mis hijos y mi generación, en el nombre de Jesús Amen.